«Tómate un trago de whisky: ¡te calentará!». Seguro que has oído ese dicho (o algo parecido), pero no te dejes engañar. La verdad es que beber en tiempo frío puede llegar a ser peligroso.

El alcohol y la exposición al frío son una combinación peligrosa, y si vas a beber cuando hace frío, debes saber cómo prepararte. Esto es una serie de informaciones y consejos que te ayudarán a prepararte para un invierno que se espera sea muy frío.

Un gran malentendido

El alcohol puede hacerte creer que te estás calentando, pero esto es engañoso. Cuando bebes, el alcohol afecta a los vasos sanguíneos que se encuentran justo debajo de la piel. Se abren y fluye más sangre, y calor, hacia ellos.

Pero esto aleja la sangre y el calor del centro del cuerpo. Así que, aunque parezca que tienes calor porque tu piel está caliente, tus órganos vitales no reciben suficiente sangre para funcionar con normalidad.

Además, al enviar más sangre caliente a tu piel en realidad estas acelerando la pérdida de calor de tu cuerpo hacia el exterior. Básicamente, estás encendiendo un radiador que envía tu preciado calor al exterior. Puede que te sientas caliente, pero esto crea una situación peligrosa.

Aunque puede ayudar a prevenir la congelación de los dedos o las orejas, el envío de sangre a la piel la aleja del corazón, los órganos vitales y el cerebro. Como resultado, la temperatura corporal desciende. Esto es especialmente peligroso si tienes problemas de corazón.

El alcohol y las malas decisiones

El alcohol puede mermar nuestra capacidad de tomar buenas decisiones, lo que puede llevarnos a correr riesgos que no correríamos estando sobrios. La combinación de consumo de alcohol y clima frío puede ser letal.

Sentirse acalorado por la bebida y quitarse la chaqueta, el jersey o los guantes en el exterior aumenta el riesgo de hipotermia.

O si tomas la decisión de volver a casa sin chaqueta cuando está nevando puedes provocar un descenso drástico de la temperatura corporal, lo que puede dar lugar a una hipotermia. Y una hipotermia grave puede ser mortal si no se identifica y trata a tiempo.

La bebida también afecta a nuestro equilibrio y a nuestra capacidad para juzgar el entorno, lo que hace que sean más frecuentes los tropiezos o las caídas, sobre todo con el pavimento helado.

El alcohol es un diurético

Cuanto más bebas, más frecuentemente tendrás que ir al baño. El alcohol hace que orines mucho, lo que acelera la deshidratación.

Eso, a su vez, puede hacerte más propenso a la hipotermia. Aunque la opción más segura es evitar beber en el frío, si decides hacerlo, sigue estos consejos para mantenerte a salvo.

  • Lleva ropa de abrigo y viste en capas para poder quitarte una o dos capas y volver a ponértelas cuando sea necesario.
  • Come alimentos grasos o ricos en carbohidratos antes de beber.
  • No tomes bebidas demasiado frías.
  • Alterna entre bebidas alcohólicas y no alcohólicas.
  • Acompáñate siempre de un amigo sobrio para asegurarte de que tomas decisiones responsables.
  • Y lo que es más importante, ten en cuenta que beber cuando hace frío puede ser peligroso.

Por admin