Utilizar una contraseña robusta, que contenga números, mayúsculas, caracteres especiales y que sea única es el primer paso para mantener protegidas las cuentas y datos personales, por ello es importante conocer porque es esencial incorporar este hábito para mantener las cuentas y datos personales protegidos.
Por consiguiente, en este artículo se ofrecerá información importante de cada cuanto es conveniente cambiar las contraseñas de las cuentas, así como cuáles son los pros y los contras de cambiarla periódicamente, así como algunos consejos para hacerlo de forma segura.
¿Cuánto es recomendable cambiar las contraseñas?
Las contraseñas son la puerta de entrada a nuestra vida digital, tanto para redes sociales, como cuentas bancarias y cualquier otro tipo de servicio en los que se almacenan datos personales o información importante.
De allí radica la importancia de que esta clave debe ser robusta, fuerte y única para cada caso, pues esto representa un hábito importante para estos tiempos en los que la mayoría de personas ya tienen una vida online.
De igual forma, es necesario cambiar las contraseñas regularmente, es recomendable sobre todo si se tiene una contraseña simple, de no más de 7 caracteres, pues puede ser vulnerada por un ciberdelincuente en pocos segundos, por lo que actualizarla periódicamente debe ser una prioridad.
Consejos para cambiar las contraseñas
Los cibercriminales utilizan diferentes técnicas para tener acceso a tus contraseñas, una vez que tienen acceso a tus datos pueden utilizarlos para suplantar tu identidad o cometer alguna estafa.
Ahora bien, para proteger bien como son las contraseñas existen varios consejos que se mencionan a continuación:
Frecuencia del cambio: las contraseñas deben ser actualizadas cada tres meses con el objetivo de que en caso de ser vulnerables el intruso tendrá menos tiempo para cualquier actividad que no esté autorizada.
Contraseñas robustas: los expertos recomiendan que para que una contraseña sea segura hay que cumplir con características importantes como son las letras minúsculas, caracteres especiales, mayúsculas y números, deben tener como mínimo 8 caracteres, hay que evitar que las contraseñas dispongan de información personal como fechas de nacimientos, nombres, etc. Mientras más compleja sea la contraseña será mejor para los hackers.
Autenticación en dos pasos: siempre que se pueda, hay que activar la autenticación en dos pasos, esta capa de seguridad requiere de un código adicional, normalmente enviado con un mensaje de texto al móvil o una confirmación de acceso a través de cualquier otra plataforma.
Gestores de contraseñas: utilizar gestores de contraseñas confiables son importantes para generar claves seguras, estos programas simplifican la gestión de la contraseña y también garantizan que estas sean únicas en cada cuenta.
Monitorización de actividad: es recomendable revisar regularmente la actividad de las cuentas para detectar cualquier actividad sospechosa, pues muchas plataformas ofrecen registro de actividades que permiten verificar cuándo y dónde se está accediendo a la cuenta.
Verificación de identidad: cuando cambien una contraseña, verifica la identidad a través de métodos seguros como es él envió de código de verificación al correo o al teléfono, esto evitará cambios no autorizados por parte de terceros.
Finalmente, cambiar la contraseña con frecuencia, es una prioridad, así que siguiendo los consejos mencionados anteriormente se puede reducir el riesgo de que la información personal esté en manos de cibercriminales y poder proteger de forma segura la información personal y financiera.